Namas entrar, nos atiende una jovencita vendedora con bonito pircing en el ombligo y amable cara sonrosada.

El Sr. Eyo comienza a interrogar a la vendedora cien y una pregunta sobre la elasticidad de las cuerdas, alargamiento estático, caídas factor 2, peso, número de haces,  grosores, deslizamiento de funda, flexibilidad del nudo y todo lo que uno quiera imaginar…

Tras ver, leer y comentar las doce etiquetas de las doce cuerdas, y apreciando que se nos hace tarde, decide regresar por la tarde… según sus palabras: !para poder meditar mientras comemos!

Esa misma tarde, la misma joven vendedora con el mismo bonito pircing en el ombligo y la misma amable cara sonrosada, le muestra otras ocho cuerdas… El Sr. Eyo las analiza de nuevo, una a una, pregunta con repregunta... juntando y comparando… descartando una a una.. y cada una de otras unas…

Por fin, el Sr. Eyo se queda con solo tres cuerdas en sus manos, (en realidad era la joven vendedora con bonito pircing en el ombligo y amable cara sonrosada, quien las sostenía) pero… en fin…ya lo dicen: la paciencia es virtud de las vendedoras…

 
Finalmente El Sr. Eyo mirando los ojitos de la joven vendedora con bonito pircing en el ombligo y amable cara sonrosada le hace la siguiente pregunta:

- Para ti, cual es la diferencia entre estas tres cuerdas…?

Yo lo mire, la vendedora sonrosó enrojeciendo progresivamente de morado hasta azul oscuro... lo miró, él me miró, yo mire a la vendedora y ella, tras soplar, (Buuufffffff)…. sentencio:

- Sr. Eyo… LA DIFERENCIA ES EL PRECIO!

Aaaaahhh

PD. El Sr. Eyo miro el precio... miro su cartera... frunció el ceño...  y dijo:

- Upss!!! PUES ESTA!!

Jejeje… En fin.. ya lo dicen por ahí: Es mejor tener algunas dudas… que conocer todas las respuestas!